Guatemala nunca antes se había quedado tan cerca de lograr una nominación al
Oscar como en la última
edición de los premios. 'La llorona', la tercera película que representó al
cine guatemalteco en la categoría de Mejor Película Internacional, marcó un hito al convertirse en la primera que conseguía
entrar en la 'shorlist' de finalistas. La cinta de Jayro Bustamante
fue uno de los títulos de habla no inglesa más celebrados de la
pasada temporada: consiguió cinco premios en la categoría destinada a las películas internacionales (incluyendo el de la National Board of Review) y
nominaciones en los Globos de Oro y los Critics' Choice.
Cuatro años después de su ópera prima ('Ixcanul'), Bustamante se ha consolidado como una de las voces más potentes del cine latinoamericano no solo gracias a 'La llorona' sino también a 'Temblores' (estrenadas ambas en 2019). Si 'Temblores' es un desgarrador relato sobre un tema tan controvertido como las terapias de sanación de la homosexualidad, en 'La llorona' se atreve a tratar el terrible genocidio perpetrado por la dictadura militar de su país. Pero este no es un film político al uso sino que el director emplea los recursos propios del cine de terror para crear una singular historia de fantasmas que resulta tan estremecedora por su inquietante atmósfera como por los hechos reales que relata.
Sinopsis
Treinta años después de un conflicto armado ocurrido en Guatemala, se abre
una causa penal contra Enrique Monteverde, un general retirado que estuvo al
frente del genocidio. Aunque en un principio es condenado, el procedimiento es declarado nulo y la sentencia queda sin efecto. De vuelta en casa junto a su familia, y en medio de las protestas de quienes están disconformes con el resultado del juicio, el hombre comienza a escuchar durante las noches el llanto de una mujer y a experimentar algunos acontecimientos sobrenaturales.
Críticas
Javier Ocaña (El País): "'La llorona' se acerca al mito hispanoamericano de la madre que ahogó a sus hijos en el río, y que hace poco dio lugar a una
producción de terror homónima desde Hollywood. Sin embargo, Bustamante le
otorga un giro político, emparentando la figura folclórica sobrenatural con
el genocidio de la población indígena por parte de militares y facciosos de
ultraderecha durante la década de los ochenta. Una obra de sensaciones más
de que narrativa convencional, con un notable uso de una fotografía de corte
tenebrista y de un sonido envolvente, que cuenta, desde el punto de vista de
la familia de uno de los mandos militares genocidas, un merecido asedio
jurídico y moral por parte de la ciudadanía. Fantasmal reflexión sobre el
remordimiento ambientada en una casona que recuerda al palacio de Luis XVI y
María Antonieta hostigado por el pueblo, la película comienza en un salón de
clase alta, velas, joyas y genuflexión, con un rezo de inspiración cristiana
(“cuídanos, protégenos, ampáranos”), y acaba en un cuartucho con semejantes
protagonistas, pero intentando expulsar ahora el mal fario en el que han
entrado sus hasta entonces brillantes y privilegiadas vidas mediante los
ritos paganos de los indígenas a los que han querido esclavizar y
exterminar. Y ese es también el triunfo de los torturados y de los muertos,
frente a los que se habían considerado sus dueños."
Sergi Sánchez (La Razón): "El guatemalteco
Jayro Bustamante utiliza la leyenda de la mitología mexicana (y de
parte de América Latina) para ajustar las cuentas con la dictadura militar
de su país, responsable de un genocidio que, en la vida real, no quedó
impune. (....) Podría acusarse a Bustamante de estar utilizando el género de
terror como una excusa, de avergonzarse de él manteniéndolo en un tenebroso
segundo plano, pero lo cierto es que todas las escenas de la película -la
del inicio, una especie de ritual de limpieza que sirve como opaco prólogo a
la tragedia venidera, o la del juicio, con el rostro de la testigo cubierto
con una tela mientras describe violaciones y asesinatos perpetrados por los
militares- están filmadas de una manera harto ominosa, con lentos
movimientos de cámara que abren el plano hasta encuadrar el marco colectivo
en el que se va a desarrollar la historia. En el encierro polanskiano de
esta familia acorralada por la verdad, se masca una angustia que tiene que
ver con la magnitud de la tragedia de un pueblo oprimido. La venganza de la
Llorona no consiste en levantar al pueblo sino en conseguir que los
opresores se devoren a sí mismos. Ahí está el corazón de la auténtica
revolución: en la antropofagia de clase."
Paula Arantzazu Ruiz (Cinemanía): "El mito de La llorona es uno de
los relatos más antiguos del continente y se asocia a los miedos de la
maternidad, pero, en su película, Jayro Bustamante amplía el significado
del mito original para trasladarlo hacia el ámbito de la alegoría
política. Es un ejercicio casi "barthesiano" que consigue unas imágenes
muy poderosas y que cuestiona, además, los lugares dónde está localizado
el horror. Obviamente, tiene que ver con el hecho de quién está siendo
aterrorizado y, por ello, con los paradigmas culturales vinculados al
género, clase y etnia. Pese a lo ambicioso de la propuesta, Bustamante trenza esta amalgama de
ideas e intenciones de manera elegante. Si bien es cierto que la metáfora
del fantasma del pasado que acecha el presente tampoco nos resulta
novedosa (como tampoco relatar los genocidios en clave de terror), sí lo
es el imaginario que se plasma en 'La llorona' así como las distintas
modulaciones y arcos narrativos de sus personajes, en especial el
personaje de la matriarca Carmen, una magnífica Margarita Kenéfic que
vehicula en su interior el verdadero elemento de miedo escondido en la
oscuridad de la película, el monstruo más terrible."
For Your Consideration
Mejor Película, Mejor Dirección (Jayro Bustamante), Mejor Actor (Julio
Diaz), Mejor Actriz Secundaria (Sabrina De La Hoz, Margarita Kénefic, María
Mercedes Coroy), Mejor Guion (Jayro Bustamante y Lisandro Sánchez), Mejor
Fotografía (Nicolas Wong), Mejor Montaje (Jayro Bustamante y Gustavo
Matheu), Mejor Música (Pascual Reyes), Mejor Reparto.
Una película muy interesante. Ojalá más películas de terror cómo está, que traten temas tan terroríficos (valga la redundancia) pero que no suelen ser tratados como tal
Me gusta como utiliza la leyenda de la Llorona para hablar del genocidio en Guatemala y como tortura a una familia con ello (en especial al general responsable de la matanza). Ritmo lento, pero consigue verse bien por su corta duración. Sin embargo, no veo en que categoría podría colarse en el festival, está bien, pero no destaca en nada.
Debió haber estado nominada al Óscar, Guatemala ha estado teniendo un alza en su cinematografía muy interesante, y está película es una joya.
ResponderEliminarUna película muy interesante. Ojalá más películas de terror cómo está, que traten temas tan terroríficos (valga la redundancia) pero que no suelen ser tratados como tal
ResponderEliminarMe alegra verla aquí, pero supongo que ese será su premio.
ResponderEliminarMe gusta como utiliza la leyenda de la Llorona para hablar del genocidio en Guatemala y como tortura a una familia con ello (en especial al general responsable de la matanza). Ritmo lento, pero consigue verse bien por su corta duración. Sin embargo, no veo en que categoría podría colarse en el festival, está bien, pero no destaca en nada.
ResponderEliminar