Albania y Georgia ya forman parte de la lista de 53 países (excluyendo ya a Irán) que han elegido a su representante para competir por el Oscar al mejor film extranjero. Albania opta por "Pharmakon", del director Joni Shanaj. El film cuenta la historia de un farmacéutico de 25 años (Klevis Bega) que se siente eclipsado por su padre, un especialista en cáncer que sueña con la elaboración de un medicamento que cure la infelicidad. Además, el joven se enamorará de la enfermera que trabaja con su padre, lo que complicará aún más la relación.
Albania optó el año pasado por "The Forgiveness of Blood", de Joshua Martson, cinta que finalmente fue descalificada por la Academia y reemplazada por "Amnesty". Será la séptima participación del país en la carrera por la estatuilla.
Por otro lado, Georgia ha elegido la comedia de una directora debutante como su candidata. El film se titula "Keep smiling". Diez mujeres son seleccionadas para participar en un concurso de belleza para jóvenes madres en Georgia. El premio por el que compiten es muy apetecible: un apartamento y 25.000 dólares. La mayor parte de ellas tiene dificultades económicas y el premio sería la solución para muchos de sus problemas. Inicia así una batalla sin cuartel entre este extravagante grupo de mujeres, más o menos dispuestas a todo. Está la madre modelo pero endeudada hasta el cuello. La guapa enchufada que quiere lograrlo por sus medios. La víctima de la guerra a la que se pide que exagere su drama. La violinista fracasada en busca de una segunda oportunidad. La mujer infiel y obsesionada por el paso del tiempo. La joven oprimida por una madre ambiciosa.
Los ensayos de este decadente espectáculo se alternan con escenas de la vida cotidiana de las concursantes: bailes, desfiles en bañador y pruebas de interpretación por un lado; hijos que alimentar, el banco que llama a casa y las peleas con el marido por el otro. “Me era claro desde el principio que el tono tenía que ser tragicómico”, ha comentado la directora Rusudan Chikonia. "La única manera de tratar un tema de este tipo era tomar distancia para evitar un acercamiento moralista”.
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