Última hora

#NoOscarFest6: 'Solo nos queda bailar', de Levan Akin

Por Javier Navío - 30/05/21 5 Comentarios


Presentada en la edición de Cannes celebrada en 2019 dentro de la Quincena de Realizadores, 'Solo nos queda bailar' protagonizó una exitosa trayectoria por festivales de todo el mundo (cosechando premios en Sarajevo, Sevilla o Valladolid) y fue seleccionada por Suecia para luchar por el Oscar a la mejor película internacional (siendo una de las grandes ausencias en la 'shortlist' del año pasado). En su tercera película como director, el sueco Levan Akin volvió a Georgia, su país de origen, para contar esta historia que refleja la dura realidad a la que deben enfrentarse los homosexuales en aquellos lugares que aún parecen vivir en la Edad de Piedra. 

Sacar adelante la película fue todo un reto para Akin tanto en la preproducción (nadie en Georgia quiso financiarla) como en el rodaje (las amenazas de muerte recibidas por el equipo hicieron que fuera necesario contratar guardaespaldas). El resultado de tanto esfuerzo es un poderoso alegato contra la homofobia liderado por la sobrecogedora actuación del debutante Levan Gelbakhiani (nominado al EFA al mejor actor) y que contiene una de las escenas finales más potentes del cine reciente.

Sinopsis

Merab (Levan Gelbakhiani) lleva ensayando desde que era muy joven en la Compañía Nacional de Danza de Georgia con su pareja de baile, Mary (Ana Javakhishvili). De repente, su vida da un vuelco cuando aparece el despreocupado y carismático Irakli (Bachi Valishvili) y se convierte en su rival más poderoso, pero también en su mayor objeto de deseo. En una atmósfera conservadora, Merab se enfrenta a la necesidad de liberarse y arriesgarlo todo en el empeño.

Críticas

Elsa Fernández-Santos (El País): "En una de las primeras secuencias de Solo nos queda bailar, tercer largometraje del sueco Levan Akin, un profesor de danza georgiana interrumpe su clase para recriminar la falta de vigor de uno de sus alumnos. “La danza georgiana no es la lambada”, dice este guardián de las esencias de un baile —“la sangre de nuestra nación”— que es expresión de una masculinidad ruda y fuerte. Solo nos queda bailar es una respuesta rotunda a una tradición que excluye no ya otras sexualidades sino también otras masculinidades. La película no habla solo del despertar homosexual de su bailarín protagonista, sino de una sociedad que ahoga cualquier gesto que no responda a los cánones de hombría establecidos. (...) El resultado es una película que fluye entre la crítica social y el íntimo retrato del despertar sexual de su protagonista. Una película que habla de cómo la conquista del cuerpo (la cámara sigue los sutiles movimientos de manos, los silencios y las miradas) implica romper con el tabú de la homosexualidad en el entorno familiar (el hermano, la amiga de la infancia, la madre, la abuela) y sobre todo en la sociedad (la escuela, el maestro y la danza como símbolo de una tradición castradora)."

Paula Arantzazu Ruiz (Cinemanía): "En 'Solo nos queda bailar', el tercer largometraje del sueco de origen georgiano Levan Akin, se nos habla de cuerpos y conductas codificadas, que bailan al son de la tradición más estricta del cristianismo ortodoxo y que no pueden cuestionarse roles de género o preferencias sexuales fuera de la norma; pero en este filme de alarde lírico también se pone en escena la belleza de una cultura que se niega a desaparecer y que tiene en los bailes folclóricos, extremadamente físicos, su manifestación más refinada. Sin duda, abundan los despertares emocionales y sexuales en el cine, aunque la historia de cada uno de los adolescentes que aparecen en pantalla luchando por reafirmar su identidad es también la de una voz en resistencia; y la que hilvana Solo nos queda bailar, atrapada entre el deseo que siente por su colega (y rival) y la ambición de lograr ser primer bailarín de la compañía, es cautivadora. El personaje de Mareb conjuga inocencia y firmeza, y tiene en el rostro dulce de Levan Gelbakhiani el mejor intérprete posible. Su viveza contrarresta algunos clichés habituales en este tipo relatos y a la vez es el claro reflejo de la desesperación y la melancolía que se sienten cuando llegan las amarguras del primer amor."

Beatriz Martínez (Fotogramas): "A través del personaje de Merab, encarnado por un impresionante Levan Gelbakhiani en su debut como intérprete, nos adentramos en un microcosmos no solo regido por la disciplina, sino también por la preservación del espíritu tradicional. (...) Pero quizás su mayor hallazgo sea utilizar el elemento de una danza profundamente masculina, brusca, ruda y castradora para hablar del descubrimiento de la homosexualidad. Al principio, Akin filma los bailes y los cuerpos como si estuviéramos viendo un documental para, poco a poco, ir introduciendo en ellos el elemento narrativo, como si de alguna forma, contaran sin necesidad de hablar la historia de los personajes. La tensión y el deseo irán filtrándose en los movimientos a través de la rivalidad que se establecerá entre Merab y un nuevo integrante de la compañía. La rigidez expresiva de los primeros compases poco a poco irá dando lugar a un nuevo espacio de manifestación interna que se convertirá en externa a través del elemento físico. También entrarán en juego las miradas, la erótica de ver y desear, de ser observado y deseado. 'Solo nos queda bailar' nos introduce en una cultura rígida e intolerante a través de unos moldes expresivos muy libres y fluidos, apostando por la ruptura de prejuicios a través de una juventud que tiene la llave para cambiar el mundo."

For Your Consideration

Mejor Película, Mejor Dirección (Levan Akin), Mejor Actor (Levan Gelbakhiani), Mejor Actor Secundario (Bachi Valishvili, Kakha Gogidze), Mejor Actriz Secundaria (Ana Javakhishvili), Mejor Guion (Levan Akin), Mejor Fotografía (Lisabi Fridell), Mejor Montaje (Levan Akin y Simon Carlgren), Mejor Música (Zviad Mgebry y Ben Wheeler), Mejor Reparto.

Dónde verla

Movistar
Filmin

5 comentarios to ''#NoOscarFest6: 'Solo nos queda bailar', de Levan Akin"

ESCRIBE TU COMENTARIO
  1. Un claro candidato a Mejor Actor del NoOscarFest

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Es la única categoría donde yo creo que merecería estar.

      Eliminar
  2. Tengo que reconocer que a mí me sorprendió mucho ver esta película clasificada directamente para el festival. Hubiera entendido que se hubiera puesto dentro de la votación para las últimas cinco candidatas (aunque es cierto en ese caso lo más probable es que no hubiera tenido opciones de clasificarse), pero la clasificación directa creo que le quedaba grande.

    Había candidatas con mucho más peso y con un mejor recorrido en la carrera de premios, y no creo que lograr menciones en los festivales de Sevilla o Valladolid justifique su presencia aquí, sobre todo teniendo en cuenta que se han quedado fuera películas premiadas en festivales mucho más importantes y que además han tenido presencia en los premios de la crítica norteamericana.

    Doy por hecho que ha sido una elección personal de los responsables de esta web, y en ese sentido no tengo nada que objetar, ya que el festival lo organizan ellos. Y para que engañarnos, todos habríamos hecho lo mismo y nos habríamos tomado la libertad de meter de forma directa alguna película que nos hubiera gustado especialmente.

    Al que le haya gustado esta película, le recomiendo fervientemente el documental 'Bienvenidos a Chechenia', que tiene una temática de base parecida y se desarrolla en una región con una cultura similar, concretamente en Chechenia, que está al lado de Georgia.

    ResponderEliminar
  3. Muy buena película que te atrapa con los personajes de Merab e Irakli. También hay que reivindicar a la abuela de Merab en las pocas escenas que sale. Me gusta mucho como retrata la sociedad georgiana y cómo afecta eso a Merab en todos los sentidos. La escena final es brutal.

    ResponderEliminar
  4. Hermosa película. Hermoso final

    ResponderEliminar