slate.com: "Un mes antes de que Ronald Woodroof muriera por una enfermedad relacionada con el SIDA en septiembre de 1992, el guionista Craig Borten entrevistó al texano con la esperanza de poder llevar su vida a la gran pantalla. Su historia era idónea: Después de que Woodroof conociera que era seropositivo a mediados de los 80 y que fuera rechazado para los ensayos de los nuevos fármacos, el mujeriego y electricista homofóbico buscó otras maneras de conseguir el tratamiento que creía que necesitaba para sobrevivir. Su aventura principal fue Dallas Buyers Club, su propia versión local de una red internacional de servicios de distribución de droga pero con medicación contra el SIDA. Tras el diagnóstico, se le dio treinta días de esperanza de vida. Él vivió siete años más.
Borten dedicó más de 20 años a investigar junto a la también guionista Melisa Wallack para hacer la película. "Craig y Melisa encontraron la combinación perfecta de precisión" cuenta el productor de la película Rachel Winter. "No sólo por los detalles médicos, sino también sobre los asuntos legales y gubernamentales a los que Ron se enfrentó. Y además, la película tenía que ser entretenida".
A diferencia de la mayoría de personas que se convierten en protagonistas de películas, la vida de Woodroof no se ha documentado ampliamente en noticias o en libros. El conocimiento más exhaustivo de la labor del activista pertenece a los propios guionistas: Borten tiene grabadas más de 20 horas de entrevistas con él y tuvo acceso a sus diarios personales. Según él, el guión es una "representación bastante exacta" de la vida de Woodroof , pero reconoció que él y Wallace emplean una gran cantidad de licencias poéticas para llevar su vida a la pantalla.
En la película, Ron se presenta como un vaquero de rodeo a tiempo parcial y un electricista antes de conocer diagnóstico. Además, se le ve teniendo un trío con dos mujeres en un puesto del rodeo y se ve haciendo bromas misóginas y homofóbicas con sus amigos durante descanso del trabajo . El verdadero Ron era de hecho electricista y trabajaba como contratista independiente con empleo esporádico. Aunque la película comienza y termina con él en un rodeo, Woodroof sólo era un entusiasta del rodeo, pero no un profesional. Sin embargo, los guionistas lo utilizan en la película como una metáfora de la lucha y la capacidad de sobrevivir mucho más tiempo de lo que los médicos le decían. Como ocurre en la película, tras el diagnóstico Woodroof perderá a sus amigos.
En "Dallas Buyers Club", a Ron le diagnostica la enfermedad 1985. Borten dice que es el año estimado en que conoció que era seropositivo, aunque podría estar infectado desde hace mucho antes. Woodroof incluso sugirió cuándo pudo contraerlo: Describe un encuentro sexual con una mujer en 1981 en la que "no acabó de sentirse bien". Woodroof sospecha que la mujer podría ser drogadicta y habló de cosas "tan crudas" que no salen en la película. La película alude a ese encuentro con una breve retrospectiva mostrando a Ron y a una mujer sin identificar.
Los personajes que cambian la vida de Ron tras el diagnóstico son Rayon (Jared Leto), un transexual también portador del VIH que se convierte en su socio del Dallas Buyers Club, y la doctora Eva Saks (Jennifer Garner), que finalmente se convierte en amiga y aliada en la búsqueda del tratamiento que necesitan los enfermos del VIH. Ninguno de estos personajes se basa en una persona en particular en la vida de Woodroof . Borten y Wallack entrevistaron a un grupo de activistas transexuales y médicos que formaron parte de la vida de Woodroff, y a través de los retazos de cada uno, crearon a ambos personajes.
Woodroof tenía una vasta red de personas - incluidos abogados , jueces , médicos , auxiliares de líneas aéreas, y personas en la frontera - que le ayudaron a conseguir medicamentos no autorizados en los Estados Unidos y para los pacientes que los necesitaban. Con el tiempo, los médicos de todo el país también comenzaron a ver los beneficios del Dallas Buyers Club, y recomendaron a sus pacientes que acudieran a él. En un artículo de 1991 de The New York Times sobre el comercio ilegal de droga , una persona que hacía frente a una etapa avanzada de la enfermedad , dijo que su doctor le dio el número de personas relacionadas con el club para pedir un medicamento en las primeras etapas de desarrollo, ya que no fue capaz de "participar en la mayoría de los ensayos clínicos"
Borten me dijo también que había muchas cosas interesantes en la vida de Woodroof que no se podían incluir en una sola película. Hubo muchas más demandas de Woodroof que no se ven en la película ni tampoco hay mención a su familia pese a que su hermana Sharon Woodroof Braden y su hija Yvette Carroll, han hablado sobre él. Borten nunca se acercó a la familia, y decidió no incluirlos en el guión, porque, según dijo, él ve la película como un "estudio de carácter" y " la manera en que Ron Woodroof se veía a sí mismo".
Ganas de verla!
ResponderEliminarmuero por verla
ResponderEliminarcuando se estrena en españa??
ResponderEliminarEs buena la reseña después de ver la película.
ResponderEliminarEXCELENTE PELICULA
ResponderEliminarBuen guión y excelente reparto
ResponderEliminarMuy buena y ayuda a concientizar la desinformacion hay que infirmarse mas sobre lo que se esta haciendo con respecto a los tratamientos y las leyes para la mejor atencion
ResponderEliminarme podrías pasar el link donde diga lo de la entrevista en el new York times para corroborarlo? Gracias
ResponderEliminarExcelente pelicula
ResponderEliminarPorque los médicos no quieren que las personas con sida tenga una mejor vida
ResponderEliminarNo se sabe
EliminarMuy buena película
ResponderEliminarSe puede encontrar en la red aunque sea una parte de las 20 horas de grabaciones de ron woodroof
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